7. SEMANA DEL AHORRO DE ENERGÍA


     La energía, en cualquiera de sus formas, es un recursos finito e indispensable para nosostros los humanos. Su producción requiere de una inversión de materiales, recursos y esfuerzos no sólo del hombre, sino también de la naturaleza.  Tu puedes ayudar a ahorrar energía con estos sencillos consejos:


1.      Evita el uso innecesario de energía. Si estás en la escuela y tu salón recibe suficiente luz de día, apaga las lámparas o solicita que las apaguen. Puedes aumentar la cantidad de luz en el salón si además abres las cortinas o ventanas. Eso ayudará también a tener un salón fresco y ventilado, ¡evitando que te duermas a media clase!

        Con ayuda de tus profesores y padres de familia haz la sugerencia de reemplazar también los focos normales de tu escuela por focos ahorradores, e incluso si esposible, colocar sensores de movimiento para que las luces se enciendan sólo cuando haya personas presentes en las aulas. Averigua qué apoyos dan los gobiernos de tu localidad o algunas instituciones sociales para realizar este tipo de proyectos. No olvides hacer énfasis en los beneficios económicos,sociales y ambientales que derivan de esto.

         Cuando salgas de un aula asegúrate que las luces queden apagadas y que ningún equipo quede encendido (como las computadoras) si ya no se va a utilizar. Si tienes clases en un aula de computación, asegúrate de apagar el monitor. Aunque tu lo veas apagado, ese foquito rojo o verde que te indica que tu monitor está en "Stand by" consume mucha energía.

2.       Extiende la acción a tu casa, y apaga los focos o aparatos eléctricos que no estés ocupando: televisión, radio, computadora, licuadoras, etc. Así ahorrarás energía.Cambia focos normales por focos fluorescentes éstos gastan menos energía. No es necesario que los cambies todos de una sola vez. Puedes comenzar por reemplazar los focos de tu cuarto, y después con ayuda de tu familia los del resto de tu casa.

3.       Disminuye el uso de la secadora. Procura secarte el pelo con una toalla lo más que puedas antes de utilizarla.

4.       El uso del refrigerador. No introduzcas alimentos calientes en el frigorífico o en el congelador: déjalos enfriar fuera. Y mantén  las puertas abiertas el menor tiempo posible comprobando que cierran correctamente. Se ahorra energía.

5.       El uso de calefacción en invierno. Si procuras que en días soleados entre en tu vivienda la mayor cantidad de sol posible, proporcionara a tu hogar luz y calor gratis. Al anochecer  cierra las cortinas y baja las persianas, porque reducirá la pérdida de calor.

6.       Temperaturas altas en el uso de lavadoras y secadoras.- Usa programas de lavado a temperaturas lo más bajas posibles, muchos detergentes son eficaces con lavados en frío.

Estos consejos son de suma importancia es imprescindible para reducir la dependencia de nuestra economía del petróleo y los combustibles fósiles. Es una tarea urgente, según muchos de los estudiosos del ambiente, porque la amenaza del cambio climático global y otros problemas ambientales son muy serios y porque, a medio plazo, no podemos seguir basando nuestra forma de vida en una fuente de energía no renovable que se va agotando. Además esto lo debemos hacer compatible, por un deber elemental de justicia, con lograr el acceso a una vida más digna para todos los habitantes del mundo. 

¿SABIAS QUE?

-Es conveniente apagar por completo los equipos eléctricos que no vayan a utilizarse ya que supone un 5-10% del consumo total, que podemos considerar del todo superfluo.

-Los tubos fluorescentes duran hasta 10 veces más que las bombillas tradicionales y son muy eficientes energéticamente.

-Regular la temperatura del aparato según las indicaciones del fabricante: un grado centígrado más de frío supone un aumento del 5% en el consumo de energía?.

-Una vivienda bien aislada puede ahorrar hasta un 30% en gastos de calefacción y que para ventilar completamente una habitación 10 minutos son suficientes? Una temperatura del 20º en invierno resulta confortable. Por cada grado que suba éste nivel, gastarás innecesariamente un 10% más de energía.

-Una lavadora a 60 °C en lugar de 90 °C reduce el gasto energético a casi la mitad. Utilizar al máximo la capacidad de tu lavadora (o secadora) con dicha práctica se reduce mucho el consumo de agua, detergente y energía, además se alarga de forma considerable la vida del electrodoméstico.